Cuando crees que todo en esta vida es un meticuloso plan a cumplir, una lista de normas y de estructuras predeterminadas… cuando consideras tener la verdad absoluta ¡entonces la vida te sorprende!”
De esas sorpresas que llegan la mañana siguiente de una fiesta a finales de noviembre, que de un puñetazo te sacan el aire, te dejan sin aliento y sin esperanza. Esas donde todavía no sabes si es una pesadilla -caes al vacío sin tocar jamás el fondo-. Y así llega esa temible noticia sobre el cual tu voz interior te advirtió repetidamente, sin que la escucharas ni una sola vez.
Hoy puedo escribir sin dolor, sin derramar ni una lágrima y con la sensatez para ya no buscar víctimas, sino ver cómo luego de una pérdida se puede salir ganadora. Y por eso comparto mi historia, para inspirar a quienes deben comenzar a recalcular su realidad o pensar en su plan B.
Aquel mes de noviembre perdí todo: ser la única, vivir sin sospechas, poder dormir toda la noche, la paz, la alegría, las promesas y los juramentos. Me convertí en un commodity. Una más en la lista de mi único. Con competencia directa y sin contemplaciones.
Y fue así como inició un viaje de casi ocho años en montaña rusa… Promesas, juramentos, perdones que venían acompañados de recaídas y más revelaciones ponzoñosas, dolor aún más intenso -de ese que te rasga literalmente el corazón, borra los recuerdos y mata a sangre fría los planes a futuro-. Oraciones, terapias, noches completas de drama, tensión y dolor. Tan solo para volver a descubrir otra desilusión.
Me convertí en una burda versión de mí misma. Me perdí buscando al culpable y a la solución mágica garantizada, lo que “debe ser” y no es… Al final aprendí que no existen las garantías sin voluntad, ni los cambios sin convicción, así como no existe lugar donde el amor de Dios no me alcance y su soberanía lo use para mi bien.
En medio de esa incertidumbre llegó mi decisión: era suficiente. No por una pequeñita que me veía con ojos de admiración y amor incondicional, sino por mí misma. Abrí los ojos y me encontré cara a cara con la realidad, difícil de asimilar en medio del aislamiento que elegí.
Entonces, hecha trizas, decidí ver mi verdad y comenzar de cero. Poner límites y amarme antes que a cualquiera. Decidí valientemente perderlo todo y entonces comencé a ganar. Ganar límites y respeto, claridad mental para toma de decisiones, la certeza de elegir mi estado de ánimo, de redefinir mi identidad, de reencontrarme conmigo misma. Dejarme amar por mi familia y por amistades incondicionales. Perderlo todo para ganarlo todo.
Lo difícil no es perder, es soltar. Soltar la ilusión del control, del script correcto de lo que la vida debe ser, soltar las expectativas y no esperar nada. Entonces llega la libertad y reconexión. Llega la verdadera alegría y paz en medio de lo incierto.
No cambiaría por nada del mundo este viaje turbulento, pues al final gané todo aquello .que no se puede robar o reemplazar: mi identidad y mi paz.
19 Comentarios
Astrid Rivera
agosto 22, 2018, 11:35 amQue lindo cuando leí esta parte no existe lugar donde el amor de Dios no te alcance, y es cierto el nos busca y nos habla de mil maneras hasta que entendemos que gracias a él hoy estamos bien.
REPLYMichelle Juárez
agosto 22, 2018, 1:27 pm¡Casi como si yo lo hubiera escrito! ?
REPLYDenise de Colmenares
agosto 22, 2018, 2:25 pmMai, te amamos y sabemos que esta es tu mejor versión para bendecir a muchos!! Dios siga llenando tu vida de paz y propósito.
REPLYAnayansi Serra
agosto 22, 2018, 2:28 pmQué expresión de soltura tan hermosa! Anima con sus palabras seleccionadas con poder para inspirar. Reencontrarse y no querer cambiar nada de lo que lo hizo posible… eso si que es poder para cambiar!
REPLYROCIO PINEDA
agosto 22, 2018, 4:11 pmMe encantó esa frase de “tu voz interior te advirtió repetidamente, sin que la escucharas una sola vez”.
REPLYDecisiones donde 2 son los involucrados y la que a permitido que se llegue a ese punto en el matrimonio siempre es quién termina perdiendo todo y la Otra es la que gana y redescubre todo lo que es capaz de realizar cuando se da cuenta del Valor incalculable que tiene ?