15 Consejos para ser una buena amiga
- Amigas, Destacados
- febrero 14, 2020
Las mujeres hemos sido dotadas para emprender en favor de quienes vienen en el camino, empezando por nuestras propias hijas. Hay muchas amigas y conocidas a las que he motivado a que se animen a dar ese salto o el primer paso para alcanzar sus sueños y metas. Estoy convencida de que sus inquietudes forman
Animate, cuestionate, emprendé, crea fuentes de empleo, mejorá tu mundo y con eso mejorarás el de las demás. Así empecé mi empresa, preguntándome y cuestionándome todo el tiempo sobre lo que quería hacer, dónde quería estar, qué me hacía feliz, qué más podía crear que generara trascendencia y me apoyara a cumplir mi propósito. Empecé
Una mujer emprendedora es energía, pasión, creatividad y tenacidad. También es alguien que no se deja vencer porque reconoce su propósito. Mujer y emprendimiento, dos palabras que unidas son súper poderosas. Una mujer emprendedora es energía, fuerza, pasión, creatividad y tenacidad, también es agotamiento y muchas veces es desilusión. Emprendimiento y mujer deberían ser sinónimos.
Por naturaleza las mujeres son emprendedoras. Emprenden con su carrera profesional, en su primer trabajo, con sus ideas y proyectos, cuando inician el matrimonio o se convierten en madres y también cuando ayudan a otras a brillar. El limpia parabrisas, el Monopoly, la calefacción central, la corrección láser para la vista, las cámaras de seguridad,
¿Es la pasión o el dinero lo que te impulsa a emprender? Cada vez somos más las mujeres que le decimos sí a nuestros sueños y que aún con miedo avanzamos para alcanzar lo que queremos. En el camino descubrimos que podemos ir tocando muchas vidas, ayudando, sirviendo y haciendo más de una happy dance celebrando nuestras
¿Ser o no ser emprendedora? Ese es el dilema. Quizás te la has formulado muchas veces y desde mi propia experiencia te comparto mi respuesta. Como amante de la lectura y las grandes obras de la literatura inicio esta columna justamente con ese texto de Hamlet acto III, escena I, escrito por el gran William