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Ánimo aleatorio: poemas de una mujer libre

Ánimo aleatorio: poemas de una mujer libre

Nicté Serra es una mujer con alma libre para hablar del amor, desamor, la muerte o la soledad de una manera tan auténtica que responden a cómo pueden llegar esos sentimientos a la vida de cualquier mujer: con Ánimo aleatorio.

Décadas antes de su nacimiento su padre ya la había bautizado con un nombre literario que sale de la novela Guayacán, de Virgilio Rodríguez Macal. Nicté es un ser humano sensible a la necesidad de otras y particularmente para plasmar en letras sentimientos que ponen la piel de gallina.

Nicté Serra, autora de Ánimo Aleatorio.

Además de poeta, es una profesional del mundo financiero empresarial. A parte de escribir comparte su tiempo con dos fundaciones que ocupan un lugar muy importante en su propósito vital: una biblioteca pública y la educación y derechos de personas con sordoceguera y discapacidad múltiple. “Llegué a la primera por ser lectora, a la segunda, por escribir. Lo poco que hago en ellas me brinda mucho” confiesa.

Es una mujer con quien las conversaciones no terminan y siempre invitan a más, a profundizar y a soñar. Basta leer sus respuestas a estas simples preguntas para reconocer su profundo amor por las letras.

¿Qué autores y autoras te inspiraron?

Ser loca lectora me ha llevado a encontrar inspiración en varios y muy distintos autores. Cada época y género tienen los suyos. Sin embargo, si quiero mencionar algunos Ángeles Mastretta, Maggie O´Farrell, Mary Karr, Leila Guerriero o Jaime Sabines son imprescindibles.

¿Alguna vez imaginaste que escribirías un libro?

He escrito desde la adolescencia, columnas, ensayos, cuentos y poemas. Durante años llené cuadernos, más adelante archivos caóticos en la computadora, luego nació el blog. Fantaseaba continuamente con la idea de escribir un libro, claro. A veces con intensidad, otras, lo veía como un sueño exótico. Sin embargo, conforme distintos medios me invitaban a escribir para ellos o solicitaban cuentos o poemas para publicarlos, la idea empezó a crecer y ocupar un propósito sólido. Ya no parecía disparate.

¿Qué te motivó a escribir Ánimo aleatorio?

Escribir ha sido la mejor herramienta para buscar la razón al sinsentido de la vida, para ver el dolor a los ojos, para interpretar los misterios de la realidad, para denunciar la injusticia y, por supuesto, para celebrar experiencias. Durante años escribí acerca de la muerte a destiempo de mi papá. Su perpetua ausencia es tema recurrente en prosa y poesía. Sigo escribiendo al respecto, es inevitable. Buena parte del libro está dedicada a él. De hecho, el título del libro nace de un poema que habla de la falta que ha hecho.

Otro motivo, también importante, es el deseo de escribir sobre la experiencia femenina. Nos azota tanto ruido respecto a la tradición, los roles y lo que se espera de nosotras que el deseo de escribir al respecto surge de forma espontánea, casi inconsciente. La identidad siempre es tema que ocupa el quehacer artístico, y la escritura, después de todo, es arte. La poesía, la más antigua de sus vertientes. Las piezas de “Ánimo aleatorio” son poesía y prosa lírica. 

El paso del tiempo es siempre un motivo. Los años van formando y transformando la forma en que vemos al mundo y nos vemos a nosotros mismos. Escribir es un recurso amable para celebrar lo vivido y lo aprendido.

Ánimo Aleatorio es una recopilación de poemas.

¿Cuál es el contenido de tu libro?

Podría decir que contiene varias historias. Es un poemario, cada poema contiene en sí un sentimiento, una experiencia, una historia al fin. Habla de la niñez, de sus maravillas y desencantos. Algunos poemas celebran a la poesía misma, a los poetas y la literatura.

La muerte de mi padre y su ausencia son temas centrales. Los cambios inevitables que llegaron tras su fallecimiento, la necesidad de volver a empezar, la ira de una niña, el dolor, la conversación constante con su fantasma, todo está plasmado en los poemas.

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Una de las ricuras de escribir poesía o prosa lírica es que los temas llevan riendas invisibles. No existe un plan estructurado. Las sensaciones y experiencias de forma subliminal van tejiendo los textos. La soledad, por ejemplo, es un tema muy presente en el libro, no por intención consciente. La mirada al amor y sus misterios, también, surge por ahí, con más preguntas que respuestas. El desamor reclama también un espacio para hablar, hay piezas que no saben ocultarlo.

Como si fuera un hilo conductor espontáneo, la identidad femenina está presente desde distintas miradas: la niña, la adolescente, la madre, la hija, la amiga, la hermana, la mujer enamorada, la mujer abandonada y la mujer consciente de su propia transformación.

¿Cuál ha sido la parte más desafiante de escribir tu libro?

La autocensura es un filo difícil de vencer. Es un desafío aceptar los textos, dejarlos estar y vivir.  No recuerdo cuántos mutilé y hasta decapité en el proceso. Aceptar la narración, su cuerpo, su voz y mensaje, aunque no sean perfectos, es el mayor reto.

Luego está la parte formal. Estructurar el orden y agrupación rompe cualquier cabeza que nunca ha publicado. Afortunadamente, me acompañó una excelente editora, dueña de toda la experiencia que yo no tenía.

¿Qué le dirías a quienes tienen una buena historia, pero temen plasmarla en un libro?

Que tracen un plan, un libro se construye paso a paso. Desde el momento en que se plasma la primera oración, empezará a soltarse, a fluir. Si el llamado existe hay que atenderlo. La sensación es casi visceral.

 ¿Qué significa para ti ser una mujer que inspire a otras mujeres?

La inspiración es un fenómeno que nace cuando algo te impacta y genera sensaciones que te encienden, te hacen sentir viva. Ese algo puede ser cualquier manifestación artística, una causa, un emprendimiento. No sé a ciencia cierta si alguna vez he sido inspiración. En todo caso, una mujer inspiradora es la que comparte su pasión con otras mujeres y en el proceso las contagia del deseo de compartir lo suyo. Si una sola mujer decide escribir porque yo lo hice, me sentiré inmensamente afortunada.

Nicté siempre ha tenido claro que “no se escribe pensando en vender libros, se escribe pensando en leer la historia. La recompensa emocional es única”, yo agregaría que esa recompensa también la recibe quien tiene la oportunidad de leer sus poemas.

Si al llegar hasta acá sientes el impulso de acudir a una librería para conocer más de las letras de Nicté, pregunta por Ánimo aleatorio en librerías como Sophos o Kitapenas

Mujer, esposa y madre. Robadora de frases. En proceso de construcción. Amante de los viajes, buenos libros y museos.

Marly Leonzo – who has written posts on Ladrona de frases.


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