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  • Aura Violeta: ¡mamá canche!

    Aura Violeta: ¡mamá canche!0

    Aura Violeta es una madre excepcional y una abuelita maravillosa a la que sus nietos llaman ¡mamá canche! Mi nombre es Samantha y mi madre se llama Violeta. Crecí oyendo música de los 70 que a ella tanto le gusta: Elvis Presley, Enrique Guzmán, entre otros. Se pasaba horas escuchando discos de acetato y tarareando

  • Mamá Adriana Regina: la reina que viene del mar

    Mamá Adriana Regina: la reina que viene del mar0

    Su nombre significa la reina que viene del mar. Sin embargo, quienes la conocemos sabemos que es la mamá que vino del corazón de Dios, porque ella es amor puro, desinteresado y extremo. Sus brazos siempre están listos para contener a quien lo necesite y sus palabras reconfortan tanto a conocidos como a extraños. Jamás

  • Histerectomía: la ciencia dice no, pero ¡Dios dice sí!

    Histerectomía: la ciencia dice no, pero ¡Dios dice sí!0

    Desde que tengo memoria, mi experiencia con el aparato reproductor femenino ha sido llena de desafíos que me llevaron a creer en el sí de Dios, a pesar del no de la ciencia, hasta llegar a la histerectomía. Siempre he bromeado que cuando llegue al cielo, después de abrazar y adorar a Jesús, le voy

  • ¡Mamá, profesión en peligro de extinción!

    ¡Mamá, profesión en peligro de extinción!0

    ¿Has notado cómo se han proliferado los mensajes que presentan solo la faceta negativa de la maternidad? El objetivo es socavar esa sublime tarea, por eso la profesión de mamá está en peligro de extinción. Ahora que en algunas esferas se intenta –absurdamente– debatir sobre si un bebé es o no un ser un humano

  • Los hijos “no te dejan hacer nada”

    Los hijos “no te dejan hacer nada”2

    La cultura antivida y la imposición de ideologías infunden miedo a la maternidad, omiten contarte que los hijos, en efecto, “no te dejan hacer nada”… nada que no sea ser mejor, nada que no sea ser feliz. La niña que jugaba a ser mamá un día, sin darse cuenta… dejó de jugar y empezó a

  • ¡Mamá a los 41!

    ¡Mamá a los 41!0

    Cuando ya había renunciado y mi corazón finalmente había superado ese anhelo, contra todo pronóstico y fuera de tiempo del reloj biológico me convertí en mamá a los 41 años. Ser mamá no siempre es una cuestion fácil para todas las mujeres, algunas debemos transitar por un camino largo y difícil para experimentar el cumplimiento