fbpx

La última cantimplora en el desierto

La última cantimplora en el desierto

Si tener un buen peso, disimular tus arrugas y vestir a la moda te hace sentir la última cantimplora en el desierto, es probable que tu estima esté sobrevalorada.

Descríbete en cinco palabras. Aunque no lo creas esos términos esos términos son capaces de medir tu autoestima o amor propio. Ese ejercicio puede expresar qué tan equilibrado tienes el concepto de ti misma.

El amor es la fuerza más poderosa del mundo, dicen en los libros y en las producciones cinematográficas. Sí, esa es la fuerza que nos eleva o nos estanca. Y no solo nos referimos al amor que podemos recibir de otros, sino el amor que nos tenemos a nosotras mismas.

No olvido cómo me enganchó la novela de la escritora cubana Zoé Valdes, Te di la vida entera (1996), que narra la historia de Cuca, una jovencita de 16 años que se enamora perdidamente de un hombre que desaparece por períodos largos y ella pasa toda su vida aferrada a serle fiel mientras saca adelante a su hija, son páginas llenas de boleros, esperanza y desencanto.

Amé la película The wife (2018), maravillosamente interpretada por Glenn Close que pone en perspectiva lo que el desamor propio puede propiciar. La esposa perfecta sacrifica sus sueños y ambiciones para mantener vivo su matrimonio, pero 40 años después llega su límite. Es loable que una mujer anteponga los sueños de otros a los propios, que sea capaz de renunciar a sí misma para que otros brillen, pero eso tarde o temprano pasa factura… No niego que es aplaudible que amemos de manera tan intensa, pero no se vale anularnos o borrarnos en el proceso si tenemos un propósito que hay que cumplir, hay descendientes qué marcar, inspirar y lanzar lejos a través de nuestro ejemplo.

Pero estos dos ejemplos me muestran que las mujeres, solemos olvidar que el amor propio es el que nos sostiene para amar a quienes nos rodean. Aunque no lo creas, la autoestima, ese concepto que desarrollamos de nosotros mismas, el modo en que nos vemos, nos percibimos o nos valoramos condiciona nuestra interrelación con otros.

El desafío es que te valores con cierto equilibrio, ni te creas la última cantimplora del desierto ni te descalifiques porque terminarás llena de inseguridad que te impedirá no cumplir tus metas.

Así que antes de poner los ojos en las desventuras de pareja, pongamos atención al nivel de nuestro amor propio, que con puede que nos exigirá examinar el pasado (qué palabras o experiencias te formaron o deformaron), nos llevará a aceptar los errores que hemos cometido y a perdonar a quienes han dejado huellas en nuestra vida y esa misericordia también debe aplicarse a nosotras.

Una mujer con una balanceada autoestima no será capaz de conformarse con una vida a medias, ni sueños pequeños, mucho menos se limitará a recibir migajas, no se dejará vencer en ninguna área de su vida y luchará por retener lo que ama.

El amor propio tiene el poder de advertirnos cuando alguien no nos ama como merecemos, cuando las palabras entierran nuestros sueños, nos quieren controlar, manipular y coaccionar. El amor propio nos ayuda a marcar todos los límites necesarios para que no abusen de nosotras, eso incluye a la familia, a las conocidas y a la pareja.

Una mujer con la adecuada medida de amor propio es capaz de pedir ayuda cuando las cosas se escapan de las manos ante una crisis de depresión, de ansiedad y mucho más cuando su vida corre peligro.

¿Cuál es tu medida de amor propio?

También puedes leer Cuánto te amas a ti misma.

Hay síntomas que pueden mostrar que tu nivel de amor propio puede estar bajo:

La autocrítica: cuando eres la primera que apoya a otras a alcanzar sus sueños, pero tiendes a autosabotear los tuyos por temor o porque no te crees capaz.

Te exiges demasiado: cuando el cuidado por los detalles sobrepasa la perfección, toma nota y recuerda que eres un ser humano susceptible a los errores. Acepta tu vulnerabilidad.

A todo le dices que sí: es un reflejo que muestra que no hay límites. Por su puesto, es bueno ayudar a otros, pero cuida que la razón no sea agradar a los demás para que te acepten.

Careces de agradecimiento: si no eres capaz de estimar las cosas y personas que te rodean y te enfocas más en tus carencias, es necesario que trabajes en practicar la gratitud. Ese agradecimiento puede hacer florecer otras emociones positivas en tu vida.

Cuidado de tu cuerpo: los malos hábitos pueden alterar tu salud que consumirá tus fuerzas y no podrás avanzar hasta donde te lo has propuesto. ¡Ámate con lo que comes, con alimentar tu espíritu y el alma!

Sana tus heridas, mírate con ojos de amor, no esperes que alguien te vea de una manera distinta a la que tú te ves.

Mujer, esposa y madre. Robadora de frases. En proceso de construcción. Amante de los viajes, buenos libros y museos.

Marly Leonzo – who has written posts on Ladrona de frases.


Marly Leonzo
ADMINISTRATOR
PROFILE

Artículos relacionados

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked with *

– who has written posts on Ladrona de frases.