No importa si tus metas son profesionales o personales estos 3 pasos te ayudarán a concretarlas.

El año 2022 despertó y con él también las facilidades de cumplir tus metas y hacer realidad tus sueños. Mientras lees estas líneas tienes una nueva oportunidad de empezar una vez más.

Es el momento de alumbrar cosas nuevas y permitir que los desiertos florezcan y de triunfar completando lo que te habías propuesto antes y no habías podido alcanzar. No es solo un buen deseo sino una invitación a que te comprometas contigo misma y corras la carrera para llegar a la meta.

Al iniciar el año aprovechemos el impulso de la temporada para plantearnos seriamente las cosas que por años hemos anhelado alcanzar. No importa si tus metas son profesionales o personales, te comparto algunos puntos que serán claves para lograrlas.

1. Ordena tus prioridades

Lo primero que debemos hacer es ordenar nuestras prioridades. Todas tenemos una gran lista de objetivos para alcanzar que van desde perder esas diez libras demás –o 20– hasta abrir una empresa sin fines de lucro para ayudar a madres de escasos recursos. Sin embargo, si no ordenamos nuestras prioridades y colocamos esos planes en una lista será difícil puntualizar el enfoque.

Conocer la razón de ser y la motivación detrás de tus planes te ayudará a organizar los objetivos en el orden correcto.

Una vez te determines y entiendas la importancia de la meta que anhelas andarás con pies firmes hasta alcanzarla, tal como puedes leer en Job 22:28

“Determinarás una cosa y te será firme”

2. Da pasos pequeños

Después de establecer tus prioridades es hora de trazar el recorrido para realizarlas, y aunque a veces parece que tus sueños son una tarea gigantesca debes recordar que las cosas grandes se logran dando pasos pequeños.

Si deseas crear, por ejemplo, una empresa sin fines de lucro empieza por leer las reglas gubernamentales del país. Lee e infórmate. Luego siéntate y escoge un nombre para tu empresa, evalúa si deseas que tenga una página web o redes sociales. Busca enlaces a artículos que se relacionen con tu proyecto, no para copiar sino para conocer todo lo que hacen para reforzar tu idea.

Por otro lado, si deseas bajar de peso empieza por reducir poco a poco algunas calorías en tus tiempos de comida. Traza un plan alimenticio razonable. Empieza a caminar media milla al día, todas sabemos que correr un maratón la primera semana nos va a costar, pero puedes empezar con una decisión a la vez.

Invita a un par de amigas al proceso y comparte tus objetivos y triunfos diarios. Te darás cuenta que puedes crecer en comunidad y la tarea que parecía enorme se convierte en alcanzable.

3. Sé persistente

Una de las definiciones de la persistencia según el diccionario Oxford es: “Firmeza y constancia en la manera de ser o de obrar”.

Muchas de nosotras leemos un articulo que nos motiva, escuchamos un mensaje que nos inspira y empezamos a correr la carrera que tenemos delante con esmero y poder, pero al pasar el tiempo empezamos a desmayar. Desaceleramos el paso y dejamos de creer que nuestros objetivos o metas son alcanzables. Le permitimos a nuestros pensamientos que saboteen lo que Dios ya ha depositado en nosotras.

Somos las más feroces impulsoras y defensoras de los sueños de nuestros cónyuges, hijos, y amigas. Sin embargo, cuando se trata de nosotras mismas a veces nos creemos que no podemos y damos lugar a que algunos pensamientos fructifiquen:

– Ya pasó mi tiempo

– No soy lo suficientemente buena

– Esto es vanidad

– ¿Qué dirán de mí?

– Esto no viene de Dios

La lista es infinita, pero la decisión es tuya.

Dios te llamó con un propósito único y especial. Si tienes una relación personal con Él sabes que esos sueños y metas en tu corazón han pasado por un filtro y son parte de Su plan para ti. “Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas” (Efesios 2:10)

Este año no seas de las que miran el partido desde las gradas, las que suspiran profundo y escriben en cuadernos sueños que no ven la luz del día. Salta a la cancha de la mano de Dios y cumple tus metas.